La pista hípica del Forcón de Avilés se llenó ayer de ilusión y nervios por el primer gran concurso ecuestre de la temporada veraniega asturiana, que finalizará mañana con la disputa del Gran Premio. Esta competición de salto forma parte de la Ruta Costera Astur.
Más de un centenar de jinetes se incribieron en el concurso, que contó con algunos nombres destacados del panorama regional, como Julio y Teresa Arias, y otros venidos de diversos puntos del territorio nacional, como el vitoriano Kevin González de Zárate o el valenciano Juan Antonio de Wit.
"Los organizadores de la yeguada Maeza lo movieron bastante y la gente respondió. Está haciendo muy buen tiempo, lo cual es muy importante", manifestó Omar Fanjul, director técnico de Equifan, que añadió que echa de menos "ver gente de fuera del hípico, porque al final aquí solo estamos padres, organizadores y jinetes. Esperemos que mañana venga más gente a ver la competición".
Los asistentes también se lamentaron en este sentido. "Nos gustaría que hubiera más público. A nosotros nos encanta venir y pasar el día aquí, porque a los niños les apasionan los caballos y se lo pasan muy bien", expresó Natalia Gutierrez, una avilesina amante de los caballos. Junto a ella también se encontraban padres de los participantes que compitieron en las pruebas matutinas. "Estamos aquí porque tenemos a nuestros hijos participando en el concurso. Nos parece maravilloso el ambiente que hay", añadió Silvia Arango.
A pesar de que el público escaseó durante algunas pruebas, no ocurrió lo mismo con el número de participantes. "Este año tenemos muy buenos caballos y jinetes. Estamos en 160 participantes aproximadamente", destacó Fanjul. Desde la organización también subrayaron la calidad de las instalaciones y de las pistas, además del detalle de haber organizado una espicha especialmente dirigida a los jinetes que venían de otras regiones.
Esta es la primera vez que la yeguada Maezu organiza un concurso de este calibre. "Criamos caballos y tenemos un hija que monta, así que nos decidimos a hacerlo", explicó Cruz Maestre, directora de Maezu, que añadió que "este es un concurso bastante ligero dentro de la temporada de verano, porque normalmente los concursos empiezan más temprano y terminan después, algo que es bastante cansado".
Los organizadores también lamentaron la mala situación de algunos clubes, fruto de la crisis económica. Es por eso que se animaron desde un primer momento a organizar una actividad de este calibre.
