Pasarse todo el año navegando alrededor del mundo en un crucero de lujo, con apartamentos privados de entre una y tres habitaciones, un tripulante al servicio de cada pasajero, parando de dos a diez días en cada destino para hacer excursiones que incluyen desde las zonas naturales de Oceanía o África hasta los hielos de la Antártida, es algo al alcance de muy pocos. Para ser precisos, de las 130 familias de 19 países que poseen en multipropiedad el crucero "The World" que hoy recala en el puerto de El Musel en su periplo mundial de 2015. Cada familia ha pagado entre uno y cuatro millones de euros por alguna de las 165 estancias de que dispone el barco y cada día a bordo desembolsan alrededor de otros 4.000 euros.
El barco, consignado por Marítima del Principado, atraca a las ocho de esta mañana en el Muelle de La Osa y permanecerá en El Musel hasta las ocho de la tarde de mañana. Trae a bordo 167 pasajeros (86 estadounidenses y 31 británicos entre ellos) y 278 tripulantes, si bien algún pasajero más llegará en Avión a Asturias, desde Israel, Turquía y Estados Unidos, para incorporarse al crucero. Otros, desembarcarán en Gijón después de varios meses de travesía, a la espera volver a bordo el próximo año. El promedio de edad de los pasajeros es de 64 años, si bien un tercio tiene menos de 50.
Dado el poder adquisitivo de los turistas, no es de extrañar que algunos sectores empresariales como el pequeño comercio y restaurantes gijoneses los esperen con los brazos abiertos. De hecho, la mayoría de sus 167 pasajeros previsiblemente optarán por quedarse en Gijón y zonas próximas, si bien 14 harán hoy una excursión de cinco horas por Lastres y Tazones y otros 11 se desplazarán mañana por la mañana a Oviedo para conocer su casco histórico y la catedral. Las empresas turísticas que los atienden también había programado una posible visita a Covadonga, que tuvo que cancelar al no haberse apuntado un número mínimo de pasajeros.
No todos optan por desplazarse en grupo por Asturias. Cuatro familias han contratado vehículos y guías para conocer la región a su aire. Para los que prefieren centrarse en Gijón, tendrán un servicio de lanzadera entre el Puerto y los Jardines de la Reina, en el centro de la ciudad, donde la Unión de Comerciantes les recibirá en un punto de información, obsequiándoles con un vaso de sidra grabado en conmemoración de esta escala.
"The World" ya visitó Gijón en su periplo de 2011 y sus copropietarios han optado por retornar este año. La ruta a realizar cada año se decide con dos de antelación por un comité de representantes de los propietarios, el capitán y un responsable de planificación de la naviera, que tiene el mismo nombre del buque y que está domiciliada en las Bahamas, una de las banderas de conveniencia habituales en la marina mercante. Cualquier destino es posible para el crucero, si tiene un puerto cerca.
El viaje de "The World" comenzó este año en Singapur y terminará en la Antártida. La singladura se hace en lo que es formalmente un crucero de 196,35 metros de eslora por 29,8 de manga y con 12 cubiertas, pero cuyo interior parece más bien propio de un yate de lujo. Un lujo con la ventaja del tamaño de la embarcación, que le permite albergar una cancha de tenis de tamaño Wimbledon, amplias piscinas o un minigolf.
El barco se botó en 2002 en el astillero Fosen Mekaniske Verksted, en la ciudad noruego de Rissa. Costó 300 millones de euros. En 2006 ya se habían vendido todos sus apartamentos, pero aún siguen llegando nuevos propietarios, adquiriéndolos de segunda mano. Con suficiente dinero y esperando a que salga a la venta, aún se puede comprar uno de estos lujosos camarotes. Pero el dinero sólo no garantiza el embarque. Los copropietarios rechazaron en su día que se incorporara a su comunidad la cantante Madonna, temerosos de los paparazzis que estarían aguardándola en cada puerto.
"The World" llega a El Musel hoy procedente de Oporto. Mañana parte hacia Bilbao. Algunos negocios esperan aprovechar esta oportunidad de oro, que tardará en volver a repetirse, dado que cada año el barco suele variar la ruta. En 2016 volverá a navegar por el Cantábrico, pero pasará de largo sin detenerse en Asturias.
