"No se recuerda un año con tanta decoración en las calles de Arriondas". Lo dicen los comerciantes, hosteleros y vecinos de Parres, que trabajan a toda máquina para que Arriondas, la capital del concejo, luzca más engalanada que nunca el sábado con motivo del 79.º Descenso Internacional del Sella. Desde la rotonda de entrada al hospital en Castañera hasta la de salida hacia Cangas de Onís es difícil encontrar una farola de la que no cuelguen banderas asturianas, gracias a la novedosa iniciativa del consistorio parragués. La asociación cultural "Selleros" también pone su granito de arena para la fiesta de Las Piraguas. Además de adornar con la bandera del Sella los distintos puntos de luz, promueve una exitosa campaña a través de las redes sociales. Bajo el lema "Arriondas ponte guapa" insta a los residentes a engalanar sus balcones. Y los vecinos cogen el guante. No hay escaparate que no luzca chalecos o monteras piconas. Tampoco faltan los collares artesanales de flores, que la asociación Parres Kinshasa vende para recaudar fondos para un centro de salud mental en Telema.

Algunos escaparates son toda una declaración de intenciones. Como el de Bibiana Argüelles, en el que se pueden ver seis candelas a modo de homenaje al colectivo Selleros, que mañana a medianoche organiza "L' Allume".

"Han conseguido que todo el pueblo se implique y que Arriondas luzca más engalanada que nunca. Era una forma de agradecérselo", explica la dueña. La florista Inés Cardín va más allá e incluso diseña sus propias piraguas de escayola. K1 y K2 de diferentes colores decoran su llamativo escaparate.

"Están teniendo gran aceptación", afirma. El lado más dulce del Descenso lo ofrecen las confiterías, con postres especiales para selleros, botijos y tritones. Una de las fachadas que más expectación levanta es la del cronista oficial de Parres, Francisco Rozada, en la calle Argüelles. Banderas, flores y una imagen del fundador de la fiesta, Dionisio de la Huerta, decoran el edificio más fotografiado de Arriondas estos días.