El Mago Nacho logró llevar la ilusión a pequeños y mayores en Villaviciosa. El de ayer fue un domingo mágico en la localidad. Y si no que le pregunten a la familia madrileña formada por Rebeca Mielgo y Pablo Bolado, junto a sus hijas Luna, de siete años, y Ruth, de cuatro. Ellas aguardaban sentadas en segunda fila para no perderse detalle. Y el Mago Nacho no defraudó. "Lo vimos anunciado y vinimos. Nos gustan mucho los espectáculos y nos sorprendió mucho que hubiera un festival de este tipo aquí", explicaron sus padres, que las seguían de cerca, pero de pie en un lateral.
El mago comenzó su actuación pidiendo un voluntario y, muy decidido, un niño de la última fila, Dani, levantó la mano. Pronto se arrepintió cuando el ilusionista le bromeó que era un "voluntario para cortarle la cabeza". Le tranquilizó diciéndole que no se preocupara porque luego se la pegaría. Finalmente se decidió a salir al escenario de la plaza del Ayuntamiento para ayudarle a realizar un juego de magia con la baraja.
Jokin y Ana también se prestaron a compartir con el mago su habilidad con una cinta. Uno de los más simpáticos fue Iván Martínez, un pequeño maliayés de cuatro años, que compartió escenario con Manuela. A ella le tocó comprobar si había algo o no dentro del saco y finalmente sacó una baraja y un pañuelo, instrumentos con los que se valió el ilusionista para realizar otro de sus sorprendentes trucos. Tras hacer desaparecer "el alma" de la carta elegida porque se borró su cara, ésta apareció mágicamente impresa en el pañuelo, que con garbo mostró Iván Martínez.
Daniel Naredo siguió entretenido el espectáculo junto a su hija Aldara, de tres años. A ambos, lo que más les gustó fue el truco del lazo, aseguraron.
Pero el de ayer sólo fue el aperitivo de este Festival de la Magia de Villaviciosa, que también se celebra en Navia y que patrocina LA NUEVA ESPAÑA. El próximo domingo habrá más. El teatro Riera acogerá la gran gala, a partir de las 20.30 horas. Actuarán Daniel KA, que traerá a Villaviciosa grandes ilusiones para sorprender al público. Karim, conocido principalmente por sus trabajos en televisión, se encargará de combinar magia y humor. Por lo que es un espectáculo que promete mucha diversión y sorpresas tanto para niños como adultos. Está pensado para el público familiar. La entrada cuesta doce euros. Se podrán comprar mañana y tarde, en la taquilla del teatro Riera, ese mismo día antes de la función.
