Los seguidores del gran Stephen King (quien arrugue el entrecejo al leer esto puede dejarlo aquí, no vale la pena disgustarse por un artículo) estamos acostumbrados a que nos provoque escalofríos (de "It" a "El cementerio de animales", pasando por "El resplandor" y otro puñado de terrores magistrales) o nos lleve a paisajes épicos cargados de imágenes deslumbrantes o nos ponga en tensión con intrigas acongojantes. También comete algún desliz de vez en cuando (trabajas demasiado, Stephen, admítelo) pero luego nos compensa con obras maestras del calibre de "22/11/63" (novelón sobre el asesinato de Kennedy que sería una lectura ideal para este verano). Con "Mr. Mercedes" (Plaza & Janés), el maestro se pasa con todo el equipo al terreno del "thriller". Ya era extraño que un todoterreno como King (no le veo haciendo literatura romántica, aunque nunca se sabe) no se dedicara al policiaco, y al entrar en un territorio tan frecuentado y propicio para los lugares comunes, el autor de "Carrie" lo hace rompiendo una lanza por la originalidad: sabemos desde el principio quién es el asesino. En resumen: el "reencuentro" entre un policía jubilado y el asesino (que usó un Mercedes para cometer un asesinato múltiple) cuya culpabilidad no pudo demostrar en su día. La vida de cientos de personas está en peligro. Aunque a veces la cabra del terror tire al monte y se nota que King debe domarla para no contaminar el género negro, "Mr. Mercedes" circula con inteligencia y vigor narrativo por las sinuosas curvas del suspense. King sigue siendo el rey.
