El éxito de este verano para la diseñadora Cristina Pascual está en apostar por "las prendas fáciles, desestructuradas, con faldas cortas y escotes pronunciados". El color también debe ser protagonista, "con mezclas diferentes a las convencionales como neutros con flúor o lisos con estampados muy definidos".
Los complementos son la mejor opción para hacer los looks sencillos más sofisticados. "Dándole un toque de fantasía con alguna aplicación o bordado realizados con materiales nuevos, apostando por los estampados en las carteras de mano o exagerando más el tacón en las citas nocturnas", dice Pascual. Y todas estas claves son las que siguen sus propuestas para este verano. La diseñadora hace una parada en su temporada más ajetreada por las entregas de vestidos de novia y de ceremonia en sus talleres de Oviedo y Madrid, para recomendar a las lectoras de LA NUEVA ESPAÑA cómo acertar en sus looks de esta temporada.
Para el día, Cristina Pascual opta por un vestido ancho con corte a la cintura y falda por encima de la rodilla, completamente desestructurado y escote pronunciado en el pecho y en la espalda. "Me gustan mucho los mix, romper la monotonía en una pieza". Por eso, mezcla los colores, el gris con el rosa empolvado, y los tejidos, el crepe de seda con el encaje metalizado en los laterales, en la misma prenda. "La superposición de capas genera movimiento y volumen en la parte de abajo, eso la hace adecuada para una amplia gama de siluetas; es un corte muy versátil". La manga abierta, tipo murciélago corto, hasta el talle, ayuda a acentuar la cintura, ajustada por un cinturón metalizado. "Las piezas en oro rosa son ideales para este look. Pondría unos pendientes, un colgante largo, un cinturón fino tipo lazada y unas sandalias planas o un tacón medio". Pascual completaría el estilismo "con una cartera grande o de tamaño medio en nude o rosa. Cada vez me gustan más para el día. En cuanto al pelo y el maquillaje, "la melena suelta o en un recogido muy desenfadado, y un maquillaje muy natural, solo con colorete en rosas y brillo en los labios".
Para la noche, vuelve a escoger el vestido, esta vez en crepe satén lila, con corte ablusado hasta la cintura y falda tipo lápiz entallada por encima de la rodilla, y un acentuado escote de aguja. "La manga también es de tipo murciélago, pero con aberturas laterales y un poco más larga, que es más adecuada para la noche". El toque del vestido lo pone un bordado realizado en materiales nuevos. "Son metalizados actualizados con formas abstractas y asimétricas".
El mix de colores lo protagonizan un cinturón tipo cordón en coral flúor y una cartera tipo "baguette" en print de leopardo. "Los zapatos, lo mejor unos salones de tacón en nude o unas sandalias de mínima expresión". El maquillaje se acentúa y coge fuerza las pestañas y en los labios, con el mismo tono flúor que el cinturón. "El pelo sigue suelto o en una coleta pegada".
