Benia de Onís celebró ayer la fiesta en honor a Nuestra Señora de Castru y lo hizo desde bien temprano. A las 9 de la mañana ya comenzó la gran salva de cohetes anunciando el día grande, y la Banda de Gaitas "Ciudad de Oviedo" tomó el relevo poco después con un alegre pasacalles. El coro parroquial cantó la solemne función religiosa en honor de la Virgen y en torno al mediodía se celebró la procesión, tras la que hubo misa solemne en la capilla y ofrecimiento del ramu. La sesión vermú amenizada por la banda ovetense puso fin a los actos de la mañana y los bailes y la subasta del ramu amenizaron la tarde.