"Como el prao de San Roque no hay nada", afirmaba ayer Verónica Rodríguez, de la peña "Reigas", cuando se disponía a disfrutar de la comida campestre por las fiestas de Tineo. Una multitud de vecinos celebraron a su patrón en familia y con amigos en una jornada medio pasada por agua, que no derrumbó los ánimos de los tinetenses. "Al final, no hizo falta el abrigo", decía Raquel Menéndez, de la peña "L'Atropellu", a lo que Marcos Morán contestó: "Ponemos el calzoncillín de felpa y funcionando". Las carcajadas cubrieron el campo de los festejos.

Los había que celebraban algo más que al patrón, como la peña "Los toquetones", que cumplió treinta años. "Somos de Tineo, pero estamos casi todos fuera y es un día que no fallamos y que preparamos por whatsapp", explicaba Covadonga Toledano. Además, ya van por la segunda generación.

San Roque es una fiesta muy familiar. Prueba de ello, son las decenas de manteles y mesas que llenaron el campo al que da nombre el patrón. "Nos juntamos todos para disfrutar, sobre todo los críos, en el prao es donde lo pasan bien", comentaba Cristina Suárez.

Las fiestas han cambiado mucho. Eso decían Benjamín Álvarez y Mario López sentados en un banco. "Ya no es como antes pero están mejorando, el campo de San Roque es el campo de San Roque y no se le da más vueltas", apuntaba Álvarez. La jornada terminó con una verbena muy animada con las orquestas "Royal" y "Olimpus".