La alternativa vegana se suma a una Fiesta de la Sidra Natural dulce, salada y sorprendente, que se puso de largo ayer en su 24 edición con la inauguración del Mercadín de la Sidra y la Manzana. Este año la innovación viene de la mano de unos artesanos de Bimenes y Murcia que elaboran tarta vegana de manzana para los seguidores de esta práctica respetuosa con los alimentos que provienen de los animales.

Elena González, creadora del novedoso pastel, explica que "además de dulces para veganos también tenemos para celiacos y productos sin azúcar, porque realizamos repostería integral ecológica con productos naturales sin aditivos ni conservantes". Aunque los protagonistas son la manzana y sus derivados, González no duda en señalar que "el ingrediente principal es el tiempo porque están hechos con mucha paciencia".

La tarde soleada hizo que una multitud de curiosos caracoleara entre las casetas para descubrir los productos expuestos por los 25 artesanos, muchos de ellos habituales, que no faltaron al encuentro con el producto más querido de Asturias: la sidra, que comparte protagonismo con la fruta con la que se elabora su zumo: la manzana. En los Jardines de la Reina y hasta el próximo domingo los panes, bizcochos, milhojas, empanadas, mermeladas, zumos, licores, quesos, o incluso pendientes de cuero, jabones o joyería serán los protagonistas.

Begoña Fernández junto a su marido Evaristo Martínez- Radío y la pequeña Adara fueron los primeros en conseguir el vaso de sidra de esta edición que se puede obtener por tres euros. La gijonesa explicaba cómo "todos los años venimos, aunque ahora vivimos en Hungría por cuestiones de trabajo". "Nos encanta ojear los productos y siempre compramos queso a la sidra" apuntaba. El sevillano Antonio Vázquez, por su parte, está pasando junto a su esposa unos días por Gijón y ya no se irán con las manos vacías: "Hemos comprado un bizcocho y pan de escanda", explicaban.

Nuria García y Luis Parajón llegaron de Pola de Siero para montar por quinto año su mostrador en el Mercadín. Acompañada de sus galletas de manzana, compota, canutillos de crema o pan de leche condensada Nuria García afirma que "Gijón es un buen sitio para venir de feria". "El año pasado nos dieron la mención especial al producto más innovador por nuestros tortos de maíz con morcilla matachana y dulce de manzana".

Elisabeth Martínez, de la localidad morciniega de Peñanes, cuenta que este año "tras el éxito de los granizados naturales de arándanos, frutos del bosque o sidra los hemos embotellado para que la gente se lo pueda llevar a su casa". Olegario Díaz, es habitual del encuentro de artesanos con la sidra ya que desde hace 14 años acude a la cita gijonesa. El de Noreña, gracias a la cerveza de manzana, consiguió también hace tres años la mención a producto innovador.

Pero no todo es gastronomía en el mercadillo de la sidra. El gijonés Ismael Marcos expone sus pendientes, colgantes y pulseras montados en plata con esmaltes al fuego azabache y cristal. Por su parte Luis Sánchez, del concejo de Cabranes, ofrece jabones, velas, sales de baño, aceites y ambientadores con aromas y formas de manzana.

El año pasado fueron más de 8.500 vasos los vendidos en una cita veraniega que se ha convertido ya en un plan ineludible para muchos, y que tendrá uno de sus puntos álgidos el viernes, con un nuevo intento de batir el récord mundial de escanciado simultáneo.