"El béisbol podría tener un futuro prometedor en España". Es lo que cree el entrenador estadounidense, George Michael Peraza, que estos días instruye en el deporte del bate a varias decenas de escolares en un campus organizado en Gijón. Pese a lo que opine Peraza, su deporte es uno de esos que, lejos de ser seguido, es prácticamente un desconocido para los aficionados a todo en España. Una pena, piensa Peraza, ya que "hay muchos chicos que juegan muy bien y el país tiene muy buenas infraestructuras para disfrutar de este deporte. Si reciben apoyo de las federaciones y la gente se anima a descubrirlo estoy seguro de que despuntaría".

El técnico americano, que afirma que le hubiera gustado "jugar al baloncesto o fútbol americano, pero debido a mi estatura no pude, así que probé aquí y se me dio bien", ha venido exclusivamente a Asturias para dar clases en el campus. Previamente estuvo en Valencia, después estará en Vigo y por último en Barcelona.

Habitualmente Peraza enseña educación física y español en la universidad de Camarillo (California), aunque "mi pasión es el béisbol desde los trece años y le dedico todo el tiempo que puedo y me dejan, por ello trabajo con la "Major League Baseball" desde 2003 y esto me ha traído a España". Podría haber llegado lejos en este deporte si no hubiera sido "por la guerra de Vietnam, que me dio a elegir entre los libros o el rifle".

Pese a las dificultades, Peraza, acompañado del dominicano Jorge Luis Marte, predican el béisbol como religión en Gijón, que se ha convertido en punto de encuentro para los amantes de este deporte. Guillermo Brower, 14 años, viene de Zaragoza: "Cerca de mi casa no había ningún campus de béisbol, así que decidí probar el año pasado y volví este". Las raíces cubanas de su padre le llevaron por el camino del bate. Mientras que la adolescente Blanca López, de Santander, hace responsable a su hermano: "Probó él y los que son hoy mis entrenadores me dijeron que lo intentara yo también, y ya llevo cinco años en este mundo de hombres, aunque estoy acostumbrada". Precisamente sobre este aspecto, el entrenador estadounidense declara: "Es una pena que en España pongan tantas limitaciones a las chicas que practican béisbol, porque las hay muy buenas.En América no pasa esto".

Aproximadamente una veintena de niños de entre 11 y 14 años practican estos días en el campo de la Laboral este deporte tan americano, pero con aroma asturiano por unos días, hasta el 27 de julio. Eso sí, George Michael Peraza espera encontrarse en el futuro con algunos de ellos ya convertidos en profesionales. Y de ello se encargará su compañero, Jorge Luis Marte, que da clases de este deporte en más de veinte colegios de Gijón. Además, hace unas semanas celebraron el europeo y "las gradas estaban llenas". El béisbol está en Gijón para quedarse.