No sólo al gusto de los adultos está enfocada la Feria Internacional de Muestras de Gijón y no sólo de exposiciones y puestos de venta vive el certamen agosteño. En el Luis Adaro también hay hueco para los más pequeños de la casa, con actividades destinadas a su entretenimiento.

El stand de EDP es uno de los que más se enchufa en la apuesta por el entretenimiento infantil. "No he ganado la carrera pero me ha faltado poco", comenta el pequeño Diego Giménez, que acaba de participar en una de las pruebas virtuales que ofrece el pabellón de la compañía eléctrica, remodelado para esta edición de la Feria con motivo de los Juegos Olímpicos y que permite competir con Usain Bolt. "A las otras actividades no he jugado, pero voy ahora", aclara Diego. Se refiere al simulador virtual que hay fueras del pabellón, en el que se pueden practicar las actividades de halterofilia, gimnasia rítmica, remo y esgrima. Tras completar este circuito olímpico, a cada niño se le entrega un diploma y un premio.

A Daniel García le apetecía más probar el circuito de quads que hay montado junto al pabellón de la compañía eléctrica. "Quiero ser piloto de Fórmula Uno de mayor y por eso me apetecía mucho montar en el quad". Le acompañaban, además de sus padres, su amigo Jaime, al que Dani le recrimina que "vas muy despacio", ocasión que Jaime no deja pasar para responder que era porque "el tuyo corría más que el mío".

"¡Le acabo de meter un golazo con Messi por la escuadra!", exclama Juan Alonso, que está jugando a la videoconsola Play Station4 en el pabellón de Liberbank contra otro chaval. "Este stand está dividido en dos partes: una de juegos y otra de tecnología", explica el propio Alonso. La parte de juegos ocupa la mayor parte del stand y en ella se encuentran desde circuitos físicos, hasta las propias videoconsolas pasando por ejercicios de confianza.

Precisamente, en el stand de JRS han llevado el mundo de los videojuegos un paso más allá y por 5 euros se puede probar un simulador que mezcla el mundo del rally con el de las videoconsolas y te hace sentir, por unos minutos, un piloto de esta competición automovilística. "Es una pasada, el precio es lo único malo, pero la experiencia está muy chula y muy real", relata Álvaro Menéndez, uno de los jóvenes que se subió al simulador virtual. Está a escasos metros de la entrada al recinto ferial por Somió. Por el camino también hay una pequeña noria de madera -la entrada cuesta dos euros- y un stand en el que se puede probar -y comprar- un "hoverboard", los patines eléctricos de moda.

"Por una buena causa" son las pedaladas que se pueden dar en el Pabellón del Ayuntamiento, que en esta edición rinde homenaje al deporte asturiano y gijonés. La campaña "Suma tus kilómetros solidarios", permite a todos los curiosos que se acerquen al stand ayudar a recaudar fondos para fines benéficos, como ayudar a la Cocina Económica de Gijón.

Tampoco podían faltar los clásicos hinchables o colchonetas, que están situados junto a la Pizzería Roma de la Feria, en el ala oeste del recinto. Y si lo que prefiere el visitante es llevarse un peluche o una cartera de "Pokémon Go", en "Fraek&Go", una de las tiendas situadas en "Fuerte - Apache", tienen la solución.

De manera que en la Feria, sea menor o mayor, el que no se divierte es porque no quiere.