"¡Nos lo pasamos muy bieeeeen!" No hay lugar a dudas. Los niños que participan en los Talleres Infantiles de Avilés (TIA) lo dejan bien claro: disfrutan a tope de la experiencia. Y lo hacen porque no paran. Caras pintadas, manos manchadas de pegamento... Todo vale para que los más pequeños se lo pasen en grande en los campamentos urbanos organizados por el Ayuntamiento con el fin de ayudar a las familias a conciliar su vida familiar con la laboral. Desde que esta actividad comenzase, el pasado 22 de junio, han sido 500 los niños que han pasado por las aulas y patios de los colegios públicos de Versalles y El Quirinal, lugares en los que se desarrolla el programa. Pero además de disfrutar en los centros educativos, los escolares también realizaron excursiones a la playa, a la fábrica de sidra de El Gaitero o a Cogersa.

"Hicimos un batido con mandarina, plátano, yogur y galletas de chocolate. ¡Y estaba buenísimo!", explican al unísono Iván Fernández, Carlos Iglesias y Nazaret Borja, todos ellos con las caras pintadas, mientras daban forma a una mariposa a partir de una pinza. "Lo que más nos gusta es escribir y jugar. En el patio jugamos a fútbol, a taxis y a más cosas; y en la clase hacemos actividades", agregan los chavales, encuadrados en el aula de los más pequeños, de 4 a 7 años.

No sólo los "enanos" se lo pasan en grande en la TIA. Los mayores, de hasta 13 años, también disfrutan lo suyo con las actividades. "Nos lo pasamos muy bien, de maravilla. Además hacemos nuevos amigos o vemos a los que ya tenemos del colegio o de venir otros años", afirma Jessica Millán. El principal objetivo de los campamentos urbanos es la conciliación y, aunque no lo parezca, los niños también son conscientes de ello. "Si no estuviésemos aquí estaríamos en casa o con los abuelos. Pero preferimos esto", aseguran los chavales. "Aunque también se pueden combinar las dos cosas", apunta otro.

Sadum Laãman y Said Mohamed, de 12 y 11 años respectivamente, y naturales del Sáhara, también se muestran encantados con la TIA. "Es genial. Nos lo pasamos muy bien y hemos hecho muchos amigos", aseguran ambos, con un castellano perfecto tras llevar varios veranos viniendo a Avilés gracias al programa de intercambio Vacaciones en Paz.

Pero, por muchas excursiones, juegos y actividades que organicen los monitores de la TIA, si hay una actividad que los pequeños destacan es "la fiesta del agua". "Nos disparamos agua y nos lanzamos globos. Es lo mejor", gritan Jessica Millán y Alexis Rodríguez, sobre el festival que organizan al finalizar cada uno de los turnos.

Los talleres infantiles se prolongarán durante el mes de septiembre y, como viene siendo habitual, se desarrollará entre las 8.00 y las 15.00 horas. También se mantendrán los precios, estipulados en 57,60 euros para participar sin servicio de comedor, y de 81,30 euros con comida. Las matrículas podrán formalizarse en el servicio de educación ubicado en el edificio Fuero entre las 8.00 y las 14.00. Las plazas se asignarán por escrupuloso orden de inscripción. Hasta el momento ya han sido apuntados un total de 44 niños para participar en la última tanda de los campamentos de verano. Después, comenzará el cole.