La carrera de burros de la localidad sierense de Pañeda, disputada en la tarde de ayer, no fue popular como suele decirse sino, más bien, populista. Porque en ella destacaron dos de los grandes de la actualidad política. Uno de ellos fue Donald Trump, que encarnó el joven Rubén Moro, y que apareció con todo el aparato irónico que requería la ocasión: con un águila de cabeza blanca al hombro y con el burro vestido de Charro mexicano, en homenaje a la "amistad " que une al presidente norteamericano con sus vecinos del sur.

El otro era Pablo Iglesias, personaje interpretado por José Ignacio Cardín que tampoco se quedó corto en su sorna: en este caso, el burro montado por Pablo Iglesias acarreaba en una camilla a un muñeco que representaba a Mariano Rajoy. El caso es que Iglesias había encontrado los billetes de Rajoy y este, del disgusto, se había desmayado.

Estos disfraces hicieron las delicias del respetable, que se entusiasmó también con la competición. La carrera, como mandan los cánones, fue muy disputada y, en ocasiones, accidentada.

Pero, ¿cuál es la clave para ganar una carrera de burros? El flamante campeón de la que se disputó ayer en Pañeda, Saúl Fernández Lorenzo, lo tenía muy claro: "Hay que asegurarse para no caer y perder tiempo". Eso fue lo que hizo en una carrera en la que había "mucha competencia" y que estuvo "muy reñida". Su montura, "Blanquito", fue el campeón en todas las modalidades: la de velocidad y la de marcha atrás. En este último caso el jinete es, en realidad, quien va marcha atrás, mirando a las posaderas de su jumento, que camina como suele caminar siempre si no se tuerce la cosa: hacia adelante.

Aun así, a pesar de la victoria, el jinete aseguró que el burro venía "un poco desenchufado". Porque él se toma las carreras muy en serio. Se compró un animal este año y ha estado compitiendo con él en todas las carreras que ha podido. Y en casi todas ha salido airoso.

La clave es el entrenamiento del animal. "Hay que entrenarlo para que se acostumbre a correr", dijo.

Saúl Fernández se impuso en la final a Juan Hernández Rosillo, de La Felguera, que ocupó el segundo lugar, y al corredor de Pañeda Rubén Blanco Argüelles, que obtuvo el bronce. Todo un mérito para los tres del cajón.