La Xana, el Trasgu, el Busgosu, la Güestia, el Cuélebre y hasta nueve seres fantásticos asturianos más, toman por 14º año consecutivo el Jardín Botánico Atlántico en las éxitosas "Noches mágicas". Se asoman por los rincones, asustan al personal y le hacen disfrutar de igual forma protagonizando una experiencia que, en contacto directo con la naturaleza, trasladará a los visitantes al mundo de la mitología regional. El reto de esta edición -cuyas funciones comienzan el viernes y se prolongarán hasta el día 27- ha sido que el espectáculo no pierda tirón pese a llevar catorce años en cartelera y cada año cerró su programa con el cartel de "no hay entradas" casi a diario. Y este año va por el mismo camino.

Así que como novedad, y con el objetivo de hacer la experiencia un viaje más completo por el bosque del Botánico, el espectáculo se representará desde la Quintana de Rionda hasta el Itinerario Atlántico, lo que supone en total nueve localizaciones para disfrutar de este paseo lleno de sorpresas.

Los visitantes se encontrarán, en una travesía de 75 minutos aproximadamente, con un bosque lleno de flora y fauna en el que, entre arbusto y arbusto, aparecerán seres mitológicos, como les Llavanderes o los Trasnus. "Lo más importante para nosotros es que se vea el Botánico de una forma completamente diferente", comenta Carmen Gallo, la responsable de la compañía teatral "Factoría Norte", al señalar la importancia de desarrollar el espectáculo bajo la luz de la luna. Esta escasez de luz facilita la introducción en la trama de los Trasnus que interactuarán desde muy cerca con el público, al que seguirán durante todo el paseo y que, de este modo, servirán de tallo del espectáculo. Tal es el éxito de estas noches que en la venta previa de entradas ya se agotaron ocho de los pases de la función -cada día hay doble cita, a las 22.00 y a las 23.30 horas-. "¡Madre mía! Que se agoten las entradas un mes antes es toda una responsabilidad para nosotros", confiesa.

"Factoría Norte" es la compañía que desde los inicios, mano a mano con el Jardín Botánico, participa en la función aportando actores perfectamente ataviados con trajes propios de la mitología asturiana, que se encargarán de protagonizar la trama y de introducir al público en un mundo fantástico que demuestra que los seres que habitaban en el bosque aún brotan entre las ramas de los pinos.

Todo esto hace de las "Noches mágicas" "una actividad que se diferencia del resto y que puede sorprender e, incluso, asustar a los visitantes", tal y como indican los responsables del espectáculo, que no quieren que se pierda la tradición mitológica del Principado. Es así cómo seres fantasmagóricos como la Güestia, el Busgosu o el Diañu burlón se dejarán ver entre las sombras de los robles y los abetos, tratando de dar el punto sombrío a esta representación que brilla por sí sola. Completan el elenco mitológico el Nuberu o el Cuélebre, seres de enorme fuerza y dotados de poderosas capacidades que no dejarán indiferente a nadie. Son las noches más especiales del Jardín. Y tienen el favor del público.