El Grupo Codorníu, involucrado en la iniciativa «Wineries for Climate Protection», está llevando a cabo un proyecto centrado en mejorar su sistema de riego con el objetivo de reducir tanto el consumo de agua como de energía eléctrica. Hasta la fecha, la compañía debía bombear el agua para llevarla a las parcelas de cultivo, lo que supone un gasto energético relevante. Con este nuevo sistema, el agua llegará por presión natural al ser entubada desde el origen hasta la parcela haciendo innecesario el bombeo. Esto supondrá no sólo un ahorro energético y una importante reducción de la huella de carbono, sino una disminución del consumo de agua, ahorrando hasta un 15 por ciento al evitar fugas y pérdidas de distribución.