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Un camino entre pucheros

Guisos astures junto al Eo

Fina García, al frente del bar-tienda Casa Barbeiro, en Abres (Vegadeo), tiene mano con los platos de río como la lamprea o el salmón, además de con los potajes y las carnes de la zona

Guisos astures junto al Eo

En la orilla derecha del río Eo en el concejo de Vegadeo se encuentra el guapo pueblín de Abres. Podría decirse que es el último del Principado en el occidente asturiano, pues tan sólo la carretera lo separa de Galicia, cuya orilla izquierda ocupa Ría de Abres, perteneciente ya al municipio lucense de Trabada. En esa frontera entre comunidades donde se funden culturas de asturianos y gallegos, Abres sigue siendo lugar de paso de los peregrinos que van hacia Santiago por numerosas vías cuando lo hacen por la costa. De eso saben mucho Fina García Pérez y su hija María Pérez García, esta última alcaldesa del barrio de La Mundiña, y ambas muy enraizadas en este rincón de Asturias donde nacieron y al que tanto quieren.

Así fue como Fina allá por 2003 decidió abrir en su pueblo, en principio, una tienda que en poco tiempo fue bar y donde, dos años después, empezó también a dar comidas, pues cuenta con un comedor para treinta personas en la parte superior. Llamó a su establecimiento Casa Barbeiro en honor a su padre, quien, como ella explica, "ejerció el oficio de barbeiro durante un tiempo". Y a renglón seguido añade: "Este local, como tantos bares de pueblo, es más que un bar; aquí se dejan recados o mensajes para los vecinos, paquetes, se pregunta por la salud de uno y otro; en fin, que es como el centro social del pueblo".

Mientras en la parte del chigre la sidra y el vermú matinal comparten espacio con el pequeño pero bien equipado ultramarinos, en la cocina, esta mujer, que es toda vitalidad, se afana en preparar lo que ofrece tanto en su menú del día, a nueve euros, como en el del fin de semana, que es a doce. Hay dos primeros, dos segundos y postres a elegir.

"En casa éramos muchos de familia y desde muy joven cocinaba para todos. Me encanta la cocina, siempre que puedo hago cursos y me reciclo, pero me falta tiempo", señala Fina mientras recuerda lo que en su establecimiento se puede comer bien servido por su encantadora hija María, una estudiante de Químicas que los fines de semana echa una mano a su madre.

Por encargo realiza algunas de sus especialidades, como son la lamprea y platos de caza en temporada. Algunas de las elaboraciones que allí se sirven tienen su toque personal: garbanzos con chorizo, ternera, oreja, botillo y morro; pulpo a la plancha con patatas, guisos de pescado y marisco, fabas con almejas, costillas al horno o el salmón al estilo Casa Barbeiro, que elabora con sidra. Otros platos que hace y que como los primeros cocina según el día que toquen son el codillo, cordero guisado con patatinas, pollo a la cerveza o al horno, carrilleras, revueltos de todo tipo o su especial guiso de guisantes a los que incorpora chorizo, oreja o panceta.

No cierra nunca. Los fines de semana, y dado el tamaño del local, pequeñín y afayadizu, es necesario reservar en el 619677104. También sirve cenas pero por encargo. No tiene aparcamiento. Cuenta con envasado al vacío para los que quieran comprar allí alguna tentación culinaria local.

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