"He visto cosas que no creeríais".

Una frase inmortal que no necesita carta de presentación y que traslada al espectador a un decadente entorno lluvioso donde apenas cabe lugar para la esperanza. En 1982, Ridley Scott presentó con "Blade Runner" un futuro agónico donde la inteligencia artificial y el auge de la tecnología evidenciaban la decadencia moral del ser humano en una jungla de laberínticas ciudades infinitas.

Su asfixiante visión de la sociedad, inspirada en la obra de Phillip K. Dick "¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?", convirtió este filme protagonizado por Harrison Ford en una de las principales películas de culto de ciencia ficción de la historia del cine. Ahora, 35 años después, el visionario director Denis Villeneuve vuelve a llevar al público a la "macro urbe" de Los Ángeles, plagada de coches voladores y la amenaza de los replicantes, unos androides con aspecto humano.

Ubicada 30 años después de la primera cinta, Ryan Gosling da vida a K, un detective que descubre un secreto que podría cambiar la sociedad tal y cómo se conoce. Esta revelación le llevará a buscar al legendario Rick Deckard (Harrison Ford), el mejor blade runner (cazador de replicantes) del cuerpo de policía, al que se le perdió la pista años atrás.

Villenueve recupera una historia que quedó grabada en la mente de millones de cinéfilos con el mismísimo Ford encarnando una vez más ese rol por el que, con permiso de Han Solo e Indiana Jones, será siempre recordado.

Este director puede presumir de tener una de las filmografías mas cortas pero más respetadas del momento. El responsable de devolver a la ciencia ficción ese toque filosófico y abstracto con filmes como "La llegada" ha asumido la compleja tarea de continuar una de esas historias que se consideran intocables por su importancia en la cultura cinematográfica actual.

Para ello ha contado con un protagonista de altura como Ryan Gosling y unos secundarios que difícilmente defraudarán al gran público: Robin Wright ("House of Cards"), Jared Leto ("Dallas Buyers Club"), Dave Bautista ("Guardianes de la Galaxia") y la actriz cubana Ana de Armas, que da de esta forma el salto definitivo a la primera plana de Hollywood.

"Sabía que estaba en manos de Denis, alguien que iba a hacer justicia a la cinta original y que la iba a tratar sabiamente, rodeándose de los mejores socios posibles. Me atrajo el poder rellenar los vacíos de la historia, y sobre todo me enganchó su impacto emocional", reconocía Harrison Ford durante la presentación de la cinta en Madrid.

"Cuando vi la película me dejó vacío y feliz a la vez. Logra que te entregues por completo a ella. Me iban enseñando partes de aquí y allá, pero contemplar el resultado final de esa escala tan épica y operística superó todas mis expectativas. Es brillante", declaraba.

El guión de esta secuela tan esperada corre a cargo de Hampton Fancher, quién ya firmó la primera entrega de la saga, y Michael Green, un aclamado escritor que ha alcanzado un alto reconocimiento por sus libretos en "Logan" o la reciente "Alien: Covenant".

"Blade Runner" no funcionó en taquilla tras su estreno a principios de los 80. Multitud de críticos la calificaron de una película "adelantada a su tiempo".

Un término acertado puesto que posteriormente se elevó al estatus de "filme de culto". Ahora, esa atmósfera de pantallas gigantes, luces neón y un entorno húmedo a causa de la pertinaz lluvia regresa para hacer las delicias de una generación que siempre quiso ver "rayos-C brillar en la oscuridad, cerca de la puerta de Tannhäuser" y enganchar a nuevos espectadores que tienen la oportunidad de conocer un futuro decadente que se espera que nunca llegue.