París siempre es símbolo de elegancia y clase. A lo largo de las décadas los mejores decoradores del mundo se han inspirado en la capital francesa. Ahora le toca el turno a una parisina de pura cepa, la modelo y diseñadora Inès de la Fressange, que tiene en su nómina de mejores amigas a la no menos glamurosa princesa Carolina de Mónaco.
La modelo que triunfó en los ochenta con su especial estilo acaba de presentar una deliciosa colección de papeles pintados para la casa española Cordonné. En ella hay rayas, cuadros tartán y, sobre todo, grandes dosis de delicadeza. Pinceladas tricolor y tonos mostaza, oliva y carmín se ofrecen a vestir las paredes para darles ese toque evocador que desprende la capital francesa.
La propuesta de papeles pintados para esta primavera va mucho más allá y llega también a los estampados de flores, plantas, geometría y color. Los animales salvajes transmiten su energía, su instinto y su ternura. La vegetación parece escaparse entre los remates de las paredes. La casa cobra vida y alegría. La primavera se adelanta con toda su intensidad.
