La resplandeciente blancura de los glaciares ha inspirado este proyecto realizado por el arquitecto suizo Gus Wüstemann. Se trata de la reforma de un ático falto de luz en un edificio de pisos en el casco antiguo de la ciudad de Lucerna, encargada por una pareja. El apartamento sólo disponía de pequeñas ventanas abuhardilladas en el tejado y un lucernario. Pero la existencia de una azotea encima, entonces conectada por una pequeña escalera, se convirtió en pieza clave de la reforma. El arquitecto buscó, además, potenciar las propiedades de reflexión de la luz sobre el blanco para conducirla a todo el espacio.

“Imaginamos el terrado -explica Wüstemann-como la cumbre de una montaña, el lugar donde el sol brilla. Y el apartamento, como el valle donde refugiarse. Para alcanzar la cumbre, escalamos por la lengua del glaciar entre dos bloques de roca. Y al mismo tiempo es ese glaciar el que transporta la luz desde el terrado-cima hasta el apartamento-valle”.

Para ello se suprimió la escalerilla existente y un altillo que bloqueaba la entrada de luz natural y se construyó una escalera-mueble que cumple diversas funciones. Ese glaciar geometrizado, salpicado de peldaños, sirve de conexión física entre el piso y la terraza, y forma el corazón de la vivienda. Aloja una parte de la inmaculada cocina, abierta hacia el espacio central de la casa. Siguiendo el invernal símil paisajístico, el arquitecto imaginó el pavimento de la vivienda como un lago helado a los pies del glaciar, que reflejara la cálida luz de las rocas (volúmenes construidos con planchas de madera reciclada), que lo flanquean y alojan el cuarto de baño y un espacio de almacenaje.

El resultado es una atmósfera considerablemente cerrada pero fresca y luminosa. Y dado que desde la azotea se tienen inmejorables vistas, se ha convertido en una zona de la casa muy aprovechada cuando llega el buen tiempo. Para potenciar su aspecto de paisaje interior, el equipamiento de la cocina queda repartido entre la zona del glaciar y el volumen de madera, de modo que la imagen convencional de cocina se desdibuja. Otro objetivo del proyecto fue disolver la presencia de los dos muros de carga originales que dividen la vivienda en tres crujías. Una de las estrategias utilizadas es el sistema de iluminación a partir de hendiduras de luz que enfatizan el espacio perimetral procurando un horizonte y también remarcan distintos elementos de mobiliario.