En los últimos cinco años la cantante asturiana Luz Casal ha sufrido dos episodios de cáncer de mama que, si bien le han traído mucho dolor físico, en lo emocional la han convertido en una persona mucho más fuerte y le han servido para aprender sobre «las cosas importantes de la vida».

«Considero que la enfermedad, los dos episodios, me han traído cicatrices, dolor, ciertas incomodidades, pero si tengo que ponerlo en la balanza, lo que saco está más a favor que en contra porque, si sales de una experiencia dura, sales fortalecida», dijo la cantante de 53 años en México, en plena gira por Latinoamérica.

Los dos episodios de cáncer de mama que sufrió hicieron que se planteara, entre otras cuestiones, que la vida es finita y que toda la seguridad que antes la rodeaba «se tambaleara». Atrás quedó también, según contó, esa actitud de mujer independiente que la caracterizaba, pues llegó a necesitar ayuda para cosas básicas como vestirse. «En esencia soy la misma persona, pero he pulido ciertos aspectos de mi vida. Antes era muy paciente, ahora me he vuelto impaciente; las cosas las quiero ya», dijo.

«No tengo miedos ni temores a que se vuelva a reproducir porque si los tuviera, me quitarían mucha energía, y la energía hoy la tengo encauzada hacia otro lado, hacia la música», dijo.