El príncipe Juan Friso de Holanda fue trasladado a Londres en un avión medicalizado desde Austria, donde ha estado hospitalizado desde el 16 de febrero tras sufrir un accidente al quedar sepultado por una avalancha de nieve que le causó graves daños cerebrales. El hijo de la reina Beatriz de Holanda fue trasladado desde el Hospital Universitario de Innsbruck al aeropuerto de esa ciudad del Tirol austriaco, donde fue embarcado con destino a Londres, donde reside habitualmente junto a su esposa y sus dos hijas.
La Familia Real holandesa habría adoptado esta decisión, según Radio Netherlands, al constatar que en su país no existe ningún centro suficientemente especializado para el tratamiento y eventual rehabilitación del príncipe Friso. Miembros de la casa real holandesa estarían esperando en Londres la llegada del príncipe, que quedó sepultado durante unos 20 minutos bajo una gruesa capa de nieve, y su cerebro ha sufrido importantes daños debido a la falta de oxígeno que padeció durante ese tiempo, según los médicos que le atendieron en Austria.
El accidente se produjo cuando esquiaba con un conocido en una zona fuera de pista en la estación alpina de Lech, en la que se había declarado el riesgo de avalancha.
