El cantante Ricky Martin posa para «Vanity Fair» con su novio, Carlos, y sus dos mellizos, Matteo y Valentino, que nacieron el pasado mes de agosto, por medio de una «madre de alquiler», aunque él odia llamarlo así: «Yo no alquilé un vientre. Esa expresión la utilizan los fundamentalistas conservadores. Me prestaron un vientre. No pagué por él». El cantante dice que sería capaz de dar la vida por la mujer que le ayudó a traer al mundo a sus hijos.