Un equipo internacional de astrónomos ha descubierto que en las zonas habitables en torno a las estrellas enanas rojas de la Vía Láctea existen decenas de miles de millones de planetas rocosos, informó el Observatorio Austral Europeo (ESO) desde su central en Garching, en el sur de Alemania. El sondeo, realizado con el espectrógrafo HARPS, el «cazador de planetas» instalado en el telescopio de 3,6 metros del observatorio de La Silla, en Chile, permitió además deducir que en las vecindades del Sistema Solar, a distancias inferiores a 30 años luz, debe haber una centena de «súper-Tierras» (con una masa de entre una y diez veces la de la Tierra). Es la primera vez, además, que se mide de forma directa la frecuencia de súper-Tierras en torno a estrellas rojas débiles, que constituyen el 80 por ciento de las estrellas de nuestra galaxia. «Alrededor del 40 por ciento de todas las estrellas enanas rojas tienen una súper-Tierra orbitando en su zona de habitabilidad, una zona que permite la existencia de agua líquida sobre la superficie del planeta», explicó el líder del equipo internacional, Xavier Bonfils.