Palma, Agencias

Los Reyes, los Príncipes de Asturias; sus hijas, Leonor y Sofía, y la infanta Elena asistieron ayer a la misa del Domingo de Resurrección en la catedral de Palma de Mallorca, como es tradición durante la estancia de la Familia Real en la isla con motivo de las vacaciones de Pascua. Los grandes ausentes este año fueron los duques de Palma, la infanta Cristina y su esposo, Iñaki Urdangarín, que residen en Washington y cuyo último desplazamiento a la isla tuvo lugar en febrero en el marco de la declaración del segundo como imputado en el «caso Palma Arena». También faltaron los hijos de la infanta Elena, Froilán y Victoria Federica.

Tanto el Rey como el Príncipe llegaron conduciendo sus coches -un Volvo y un Ford, respectivamente- hasta la catedral, donde fueron recibidos por unas 500 personas. A la entrada del santuario les esperaban la presidenta del Consejo Insular, María Salom; el presidente de la comunidad, José Ramón Bauzá, y el obispo, Jesús Murgui. Durante el tradicional posado para la prensa, la protagonista fue la hija menor de los Príncipes de Asturias, Sofía, que saludó tímidamente a la prensa con una mano, mientras sujetaba con la otra la de su abuelo.

Para la ocasión, la Princesa Letizia vestía chaqueta de color blanco roto y unos pantalones en tono tostado. Por su parte, la Reina lucía un traje de chaqueta en rojo y negro y su hija un traje pantalón de raya marinera. Tanto en la entrada como en la salida, los Monarcas fueron recibidos entre aplausos, y los presentes exclamaron «¡Viva la Reina y viva el Rey!» y «¡Viva el Príncipe!». Cerca de las 13 horas, la misa de Pascua se dio por terminada y la Familia Real volvió a posar, tanto dentro de la catedral como para los periodistas.

Cabe destacar que el año pasado el Rey se quedó en Zarzuela preparando una visita del emir de Qatar a España, en esta ocasión se notó la ausencia de la infanta Cristina, que sí había acudido el año pasado, aunque sin la compañía de su marido. La última vez que Urdangarín acompañó a su mujer en esta ceremonia fue en la Semana Santa de 2005. La Reina realizó el pasado miércoles una visita privada, junto con Bauzá, a la fábrica de vidrio Lafiore, ubicada en la localidad mallorquina de S'Esgleieta, en la carretera de Valldemossa.

Fuentes del Gobierno balear informaron a «Europa Press» de que la Casa del Rey había pedido al Ejecutivo autonómico que la visita fuera estrictamente privada, por lo que no se dio aviso a los medios de comunicación, salvo a la televisión autonómica, IB3, que sí pudo difundir las imágenes.