Este no es el año de Iker Casillas en lo que a lo profesional se refiere. Y eso es un hecho. Primero su relación tensa con el antiguo entrenador portugués, Mourinho, luego su operación y ahora su eterna suplencia.

Parece que el capitán del Madrid está más frustrado que nunca. Y es que el 20 de enero fue el último partido donde jugó como titular, en el que además no dejó que ningún balón se colase dentro de la portería. Pero por lo visto, Ancelotti de momento se ha decantado porque Casillas esté en el banquillo y que sea Diego López el que pare el balón.

Esto ha producido que el guardameta esté desmoralizado y que a su vez reciba un aluvión de consejos recomendándole que abandone el equipo. Y es que el considerado mejor cancerbero mundialmente, no es un jugador digno de chupar banquillo, y eso lo sabe todo el mundo. Así lo demuestran las ofertas que el capitán está recibiendo para distintos equipos. Según Joseba Larrañaga de 'El partido de las 12', programa de la COPE, el portero tiene dos ofertas sobre la mesa, una del Arsenal y otra del PSG. Además se tantea que la del Manchester City está en camino.

Lo que está claro es que decidiese lo que decidiese, el dilema es harto complicado. Ya no solo tiene que pensar lo mejor para él sino para dos o ya casi tres. El de Móstoles y Sara Carbonero se convertirán en padres el próximo enero y ella tiene un trabajo de lo más consolidado en la cadena televisiva Telecinco, donde presenta los deportes del informativo del mediodía y unos larga lista de compromisos con varias firmas. Aunque esto último es lo de menos, ya que podría compatibilizarlas sin el menor problema.

Las cifras que cobra la periodista son muy altas, pero comparadas con las de su novio, sus ingresos equivaldrían a lo que Iker cobra por la prima de un partido, por lo que muy lejos está de las cifras astronómicas del galáctico.

Aunque aún es muy pronto, ya que acaba de comenzar la Liga, estas ofertas del PSG y del Arsenal, han calentado los mentideros. Muchas quinielas han empezado a barajarse en las tertulias deportivas sobre si el guardameta se irá o se quedará. Si la cosa no cambiara, no cabe duda de que el capitán del Real Madrid se encontraría entre la espada y la pared. Si quiere seguir vistiendo de blanco le tocaría chupar banquillo, pero si decidiera irse a otro equipo, tendrían que ver qué pasaría con el futuro profesional de la periodista.