Emma Suárez es la nueva chica Almodóvar en la película "Silencio". A sus cincuenta años, esta actriz con eterna cara de niña se encuentra con la oportunidad con la que sueñan tantas colegas españolas después de una larguísima carrera en la que ha atravesado por distintas etapas, desde sus comienzos como adolescente hasta su irrupción como musa de Julio Medem en los años 90 con "La ardilla roja", "Tierra" o "Vacas". "Las cosas llegan cuando llegan. Para mí, es el momento perfecto para trabajar con él, estoy muy satisfecha, y una de las cosas más bonitas que me están pasando es la cantidad de gente que me llama y que se alegra. Es muy emotivo", ha dicho Suárez tras conocerse su fichaje por Almodóvar y en plena promoción de "Murieron por encima de sus posibilidades", humor negro a costa de la crisis económica. También este año estrenará "La próxima piel".

Emma Suárez sólo tenía 14 años cuando hizo "Memorias de Leticia Valle", basada en la novela de Rosa Chacel, junto a Héctor Alterio y Fernando Rey. Y ya entonces la cámara se enamoró de ella. Son 36 años de trabajo constante y premiado con un "Goya" a la mejor actriz por "El perro del hortelano" (1996), de Pilar Miró. Una larga trayectoria que ha conocido momentos buenos, malos y regulares, y en la que no han faltado los trabajos teatrales. Suárez no es una mujer que se quede esperando en casa a que suene el teléfono. Cuando no llegan los proyectos, se busca la vida para provocar que aparezcan, eso siempre lo ha tenido muy claro, y más en un cine español tan precario.

Nacida en Madrid el 25 de junio de 1964, la suya no es una historia de vocación irresistible en un principio ni hay antecedentes familiares. En 1982 debutó en el teatro con una obra de Antonio Gala y pronto los directores se fijaron en su naturalidad y autenticidad. En 1986 participó en la serie "Tristeza de amor", con Alfredo Landa, y tres años después demostró en "La blanca paloma" que ya estaba preparada para papeles duros y cargados de sensualidad.

Emma Suárez estuvo casada con Juan Estelrich, a cuyas órdenes trabajó en la "La vida láctea" y "Pintadas" y con quien tuvo un hijo, Juan. Se separaron en 1997. Con el músico argentino Andy Chango tuvo una hija, Ada Marta. Poco más se sabe de su vida privada, que protege con uñas y dientes.