Cientos de personas hicieron ayer largas colas para entrar al provocativo parque temático Dismaland que el cotizado artista contemporáneo Banksy ha diseñado para Weston-super-Mare, una población costera al suroeste de Inglaterra. Un millar de residentes de la localidad recibió entradas gratuitas para la instalación, y cientos de ellos ya estaban a las puertas del parque dos horas antes de su apertura, a las 8 de la mañana.

Las entradas se pueden comprar por algo más de cuatro euros a través de la página web de Dismaland, que fue inaccesible durante gran parte del día debido, aparentemente, al gran número de visitantes que trataban de hacerse con un pase. El parque permanecerá abierto seis semanas. Un portavoz del artista, cuya identidad permanece rodeada de misterio, afirmó que la web recibió más de seis millones de visitas durante la mañana de ayer. El trabajo de Banksy, que se dio a conocer como grafitero en los 90, atrajo a 300.000 visitantes a la exposición "Banksy contra el Museo de Bristol", en la que transformó la pinacoteca en un museo de "Historia antinatural".

El artista levantó en esta ocasión un "parque temático no recomendable para los niños", dentro del cual reúne obras de otros 58 artistas contemporáneos, entre ellos el también británico Damien Hirst y la estadounidense Jenny Holzer. Los visitantes que acceden al recinto se encuentran con un castillo a medio derruir, furgones de Policía, barcas cargadas de refugiados y ferias sin premio.