La actriz asturiana Paula Echevarría lanza su primer perfume, en el que refleja el aroma del mar de su pueblo y el de los jabones de su abuela para conseguir oler como siempre quiso y sumar así una cuarta fragancia a la colección de la familia, en la que su hija, Daniella, es la única que todavía no tiene un frasco con su nombre.
"Ni le interesa, ella pasa de todo, sólo quiere jugar", cuenta Echevarría en la presentación de "Paula", su primer perfume, que junto a las tres colonias de su marido, dos masculinas y una femenina, forma una colección familiar llena de recuerdos olfativos. "Ahora huelo como quiero", afirma la actriz, que trabajó durante un año con una casa de perfumes para perfilar su fragancia. "Lo hice entero desde el principio, reuniéndome con Gregorio, el perfumista, durante todo el proceso", explica Echevarría, que contó al profesional "los recuerdos de olores de los buenos momentos, desde pequeña hasta ahora" para que el perfume evocase su felicidad. El olor de los jabones que su abuela guardaba en los cajones de la ropa limpia, el olor del mar de Candás, el olor de su hija y el del día de su boda inspiran la fragancia. "Es muy curioso que recuerde cómo olía mi abuela, que murió cuando yo tenía 6 años, porque no tengo recuerdos físicos de ella, pero el olor lo tengo metido", dice la actriz.
