Sienna Miller, Luke Evans y Tom Hiddleston llegaron al Festival de Cine Internacional de San Sebastián para presentar su nueva película "High rise". Los tres actores se mostraron de lo más simpáticos con todos los fans que los esperaban. Ninguno de los tres dudó en pararse y hacerse fotos con ellos y firmar autógrafos. Para Luke Evans y Sienna Miller ésta es la primera vez que asisten a este festival, mientras que su compañero Tom Hiddleston ya es un viejo conocido de Donosti puesto que en 2011 visitó la ciudad para presentar "The deep blue sea".

Miller puso un punto divertido al sugerir que el mejor ocupante para el ático del caótico rascacielos donde transcurre su película "High rise" sería "un restaurante de tapas o mejor El Bulli". La actriz, que se encontraba en el salón de actos del Kursaal respondiendo a la prensa sobre los detalles de la película de Ben Wheatley que se pasó en la sección oficial, puntualizó a su compañero Luke Evans sobre su "vecino ideal" en un edificio tan conflictivo como el rascacielos de la película. Evans dijo que "Jeremy Irons (el arquitecto del edificio), desde luego, no"; que probablemente pondría un restaurante.

"Pero, ¿qué tipo de restaurante? Ten cuidado que estás en San Sebastián, piensa en tapas. Yo pondría uno como El Bulli", dijo Miller entre las risas de sus compañeros.

Impactante con su modelo a cuadros blancos y negros de Victoria Beckham y mucho más rubia que en la película, "High rise", la actriz indicó que era fan de la novela de J. G. Ballard publicada en 1975 con el mismo título y seguidora de Ben Wheatley desde "Kill list" (2011), por lo que "no podía" perdérsela.

La película, un reflejo fiel del libro del escritor inglés de ciencia ficción, gustó mucho al público treintañero del Zinemaldía, que agradeció al director su trabajo, si bien parte del público más entrado en años no entendió mucho ese entusiasmo. "High rise" es, sin paliativos, un verdadero viaje a la locura y un compendio de excesos donde los personajes encadenan desorbitadas fiestas regadas de alcohol, drogas, sexo y violencia.

"El cine español está perdiendo el pudor", sostuvo Luis Tosar, y "El desconocido", un trepidante "thriller" de acción que protagoniza y que se proyectó en San Sebastián, a tres días de su estreno en salas, es un buen ejemplo. Persecuciones, explosiones, carreras de coches y tensión emocional de alto voltaje sitúan el debut de Dani de la Torre en la órbita de su admirado Michael Mann, aunque la historia es bien cercana, especialmente en Galicia, donde se rodó: la de un banquero amenazado de muerte por una víctima de sus estafas.

"Estamos recuperando algo que se hacía mucho en los 70, como es el cine de género. La referencia no tiene por qué ser siempre Estados Unidos; de hecho, buena parte de los 'thrillers' que se hacen allá los hacen europeos", defiende Tosar.

La diferencia, prosigue, es que los europeos "somos más complejos" desde el punto de vista moral, añade el actor, curtido en los últimos años en el género con títulos como "Celda 211" o "El niño". "El desconocido" propone al espectador viajar por "un terreno cenagoso", donde el bueno quizá no sea tan bueno ni el malo tan malo. "Yo soy un gran consumidor de cine de acción, y las películas americanas jamás me producen ningún tipo de ejercicio mental", afirma Tosar.