Emily Watson recibió ayer el premio "Donostia" del Festival de Cine de San Sebastián, un galardón que sorprendió a la actriz británica. La intérprete de "Rompiendo las olas", de Lars von Trier, a quien está agradecida "porque me abrió las puertas", afirmó que hay "mucho" de ella que "aún no se ha descubierto" y dijo que le encantaría hacer una comedia. "Creo que sería muy buena, dicho sea de paso".

De poder, volvería a trabajar con Robert Altman, fallecido en 2006, con quien rodó "Gosford Park" en 2000. "Es el ser más extraordinario que he conocido; hacía las cosas de otra manera, no utilizaba las reglas de nadie. Era una especie de filósofo del espíritu humano", subrayó.