Un guardaespaldas de Rihanna se lió a puñetazos con unos fotógrafos en Río de Janeiro cuando la cantante barbadense salía de un restaurante. El motivo de la supuesta agresión fue la presión de los paparazzi que se arremolinaban a las puertas del asador donde cenó Rihanna y que habrían llevado a la cantante a sufrir un tropiezo cuando se disponía a entrar en el microbús. Los fotógrafos, que publicaron el vídeo de la riña en internet, estaban expectantes para capturar la imagen de Rihanna vestida con una ropa transparente que dejaba ver su bikini.