Marilyn Monroe, Richard Nixon, Groucho Marx, Audrey Hepburn, Salvador Dalí... o los duques de Windsord. Todos saltaron delante de la cámara de Philippe Halsman, el primer fotógrafo que inmortalizó a celebridades suspendidas en el aire delante de su objetivo. Lo llamó "jumpology".

"Cuando le pides a una persona que salte, su atención se centra en el acto de saltar, se cae la máscara y aparece la persona real", decía Halsman (Riga, 1906-Nueva York, 1979), al que el museo parisino del Jeu de Paume le dedica hasta el 24 de enero la retrospectiva "Philippe Halsman. ¡Sorpréndeme!".