Unas ochocientas personas que habían comprado entradas para el concierto que la cantante estadounidense Madonna ofreció la noche del jueves en Turín desistieron de acudir al evento, que se desarrolló entre fuertes medidas de seguridad. "Se registraron unas 800 entradas menos con relación a las compradas, por lo tanto se puede decir que corresponden a las personas que no se presentaron", según la organización del concierto. El primer concierto de Madonna en Turín en su gira mundial "Rebel Heart Tour" comenzó dos horas y media más tarde de lo previsto en el estadio cubierto Pala Alpitour.