Phil Collins, histórico batería de "Génesis", con una gran carrera comercial en solitario, ha vuelto con su tercera exmujer, Orianne. Es un caso curioso porque ya pasaron seis años del divorcio, que le costó al músico 32 millones de euros. El cantante, de 65 años, ha hecho pública la vuelta a casa con su ex, que sufre el síndrome Brown-Sequard, lo que le produce parálisis. "Estamos juntos" desde hace una temporada, algo que nadie había advertido hasta ahora y que Collins confirma en declaraciones al diario "The Sun".