"Para ganar el secreto es disfrutar como enanos en el escenario". Verónica Vázquez es una de las 49 personas, vecinas del barrio de Contrueces, que forman la charanga "Kop'a vino". Una formación que ha ganado los tres últimos años el Concurso de Charangas del Antroxu de Gijón, y que ya acumula once triunfos en 29 participaciones. "Este año había mucho nivel. La verdad que no esperábamos este buen resultado final, lo que queríamos era salir a hacerlo lo mejor posible y disfrutar", añade Vázquez.

"Kop'a vino" solo se ha ausentado de los tres primeros puestos en seis ediciones. Siempre han mantenido un sello propio. "Con varias escenas y nuestras canciones buscamos entretener", explican desde esta charanga con tres décadas de vida y componentes de todas las edades.

Por una tarde, los cines Pumarín, Avenida, Goya, Robledo, Arango, María Cristina y Centro volvieron a abrir sus puertas. Los componentes de "Kop'a vino" hicieron un guiño a las salas de proyecciones de siempre, con sus acomodadores, proyectistas, palomiteras... y las historias clásicas de la gran pantalla, con "Indiana Jones y el templo maldito', "La guerra de las galaxias" o la delirante escena del camarote de los hermanos Marx. "Todo el mundo fue al cine alguna vez. Queríamos hacer un homenaje a los cines que cerraron en Gijón. Era complicado ponerlo en escena por el atrezzo. Llevábamos una pantalla, se iban pasando diferentes películas, los acomodadores, proyectista o las palomiteras que, con todo tipo chucherías, creaban un conjunto de fantasía", relata Vázquez.

En sus letras adaptadas no faltaron menciones a la gestión del Acuario, la contaminación atmosférica, los sueldos de los políticos de la Junta General o la nueva pistola radar de la Policía Local. "No sabría elegir un momento concreto ni determinante para haberle gustado al jurado y al público. Lo que sí tengo claro es que era algo que emocionaba", indica la componente de la charanga de Contrueces.

El año pasado su interpretación se basó en un musical de Broadway, en el que hubo espacio para adaptar sus letras a pasajes de "Cats", "Chicago", o "Singing in the rain". Esta edición, tras un duro trabajo, consiguieron mantener el nivel con su homenaje al cine. "Cada vez es más difícil superarse porque no tenemos ningún tipo de subvención. Hay muchos gastos y los premios solo son una pequeña ayuda junto a las aportaciones individuales o la lotería", advierte Vázquez. "Y eso que nosotros reciclamos todo lo que pueda ser reciclado para que nos sirva para el año siguiente", subraya.

Este Antroxu fue quizás el más completo para esta charanga. "Lo pasamos genial en el Jovellanos y también en el desfile. Hacía años que no acompañaba un tiempo tan bueno. Nos lleva todo muchísimo trabajo, horas y esfuerzo, pero la recompensa final merece la pena", concluye Verónica Vázquez, componente de una charanga que sirvió, un año más, desde Contrueces, la copa más dulce.