La serie "Cuéntame cómo pasó" cumple hoy 300 episodios, un hito que sólo han alcanzado una veintena de ficciones audiovisuales en el mundo, y un éxito que para todo el equipo supone, "más que un milagro", el resultado del trabajo y la ilusión continuados.

Con un promedio de audiencia del 26,7% y 4,7 millones de espectadores, el público sigue respaldando esta serie de TVE más de quince años después de su estreno. Y no sólo en España, ya que se ha vendido a más de 20 países, como EE UU, México, Puerto Rico, Italia, Portugal y Finlandia.

"El aniversario nos pilla trabajando, y con poco tiempo para sentir y pensar el pasado", dijo Imanol Arias durante un encuentro con la prensa. A lo largo de quince años, su personaje, Antonio Alcántara, y su familia ficticia le han proporcionado "una vida paralela", afirma. A María Galiana, la abuela Herminia, el número 300 le produce, fundamentalmente, asombro. "Parece que estoy en formol, se supone que empecé con 80 años y tendría que tener ya 95", dijo la actriz y exprofesora sevillana.

"Cuando empecé, pensaba qué trabajo más bueno me había salido, porque podía durar más de un año, y fíjate", añadió. Con un reparto estable en el que también figuran Ana Duato, Ricardo Gómez -que empezó con 7 años y ha cumplido 22- y Juan Echanove, la serie se renueva cada año con incorporaciones como Antonio Resines o Charo López en esta temporada, la número 17.

Otros actores que han pasado por ella -más de 3.000 en total- han sido Fernando Fernán Gómez, Pepe Sancho, Terele Pávez, Emma Suárez y José Luis López Vázquez, entre otros.

El equipo de guionistas también se ha ido renovando. "Ha habido un refresco permanente", indicó Ignacio del Moral, que lleva cuatro temporadas escribiendo las historias de los Alcántara. Para él, la clave de su trabajo es "dejarse inspirar por la época y por la energía de los actores". "Se trata de escuchar a los personajes para saber qué piden, más que introducir caprichos de guionista", señaló.

Joaquín Oristrell se ha incorporado como guionista. "Es una serie que ha conservado muy bien a los personajes, sin caricaturizarlos, ni hacer tonterías", subrayó. "Y los Alcántara son una familia muy española, dura, luchadora, que se cuentan las cosas a la cara. Eso, cuando muchas series quieren imitar lo anglosajón, tiene valor en sí mismo", añadió. Además, Oristrell no deja pasar la ocasión de comparar a los Alcántara con los políticos españoles que tratan de formar gobierno estos días. "Es curioso que los Alcántara sean capaces de pactar entre ellos, desde terrenos ideológicos muy distintos, mientras que nuestros políticos no son capaces. El pueblo, incluso desde la televisión, es capaz de dar lecciones de convivencia y respeto, y resulta raro que no lo veamos en la política". El capítulo 300, titulado "Un milagro", se sitúa en mayo de 1984. Herminia se prepara para una peregrinación al santuario de Lourdes mientras Antonio se vuelca en la expansión de su bodega y Carlos se enfrenta a una crisis que lo coloca casi al margen de la ley.