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La mamá rapera de Gloria Estefan

Gloria Fajardo, de raíces asturianas, arrasa en las redes sociales bajo el nombre de "Rapuela" cantando a sus 87 años junto a su nieta Emily

Emily Estefan abraza a su abuela Gloria Fajardo. INSTAGRAM

Lo primero es entrar en el ambiente: ponerse gafas de sol y sudadera con capucha. Lo segundo, improvisar la letra y dejarse llevar por la música. Y lo tercero, acabar con el típico signo de los cuernos, levantando los dedos índice y meñique de la mano. Ésas son las claves del éxito de la "Rapuela", la madre de la cantante latina Gloria Estefan que a sus 87 años recién cumplidos arrasa en las redes sociales rapeando. La abuela, de origen asturiano, se viene arriba cada vez que su nieta Emily pone el ritmo con la boca o ayudándose de una sartén. "Esta familia quiere celebrar, happy familia queremos gritar, no coman mucho o van a explotar", suelta en uno de sus vídeos, casi gritando.

Gloria Fajardo, cuyo padre emigró a Cuba desde Pola de Siero, es una fuente inagotable de humor: "Muévelo pa aquí, muévelo pa allá. Que va mi nieta linda y yo quiero llorar". También celebra la fiesta de San Patricio: "Tengan cuidado que la cerveza verde les pueden emborrachar". E incluso llega a cantar desde el hospital con una cánula de oxígeno en la nariz: "Saludos de 'Rapuela' desde el hospital; por sus oraciones ya no me siento mal. Por Dios sigan rezando que ya me quiero ir. No hay nada que a 'Rapuela' la pueda destruir". Desde luego que no. Los seguidores de su nieta -de 21 años y cantante- no paran de pedirle más y más vídeos junto a su abuela. El furor ha llegado a tal punto que "Rapuela" ya tiene hasta cuenta de Twitter.

Todo comenzó con una felicitación musical a Gloria Estefan, que cosechó miles de "Me gusta" en Instagram. "La gente colapsó. Y ahora cada vez que publico algo me dicen: ¿dónde está 'Rapuela'?", explicó Emily en una entrevista. En vista del éxito, la joven continuó grabando nuevos raps que ya han escuchado en medio mundo gracias a la espontaneidad y vitalidad de su abuela. La semana pasada cumplió 87 espléndidos años. En realidad, los cumplió su cuerpo, porque, como recordó Estefan en las redes sociales, "su espíritu, mente y corazón son y siempre serán eternos".

Desde luego, a la abuela Gloria parece importarle muy poco el qué dirán. No tiene ningún reparo en ponerse las gafas de sol y un colorido fular para gritar a los cuatro vientos: "Yo soy muy feliz cuando me toca rapear".

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