El cantante Miguel Bosé cumplió ayer, 3 de abril, 60 años como una gran figura de los escenarios y de los estudios cinematográficos y por eso mismo como uno de nuestros referentes musicales en todo el mundo, especialmente en Latinoamérica, donde nació. De casta le viene al galgo si se trata de arte, ya que es hijo del torero español Luis Miguel Dominguín y de la actriz italiana Lucía Bosé.

Miguel es uno de los artistas más polifacéticos que ha dado nuestra música. Y no sólo poliédrico en cuanto a sus canciones y su carrera artística en la gran pantalla, donde puede presumir de haber colaborado con una gran lista de artistas latinos y de otros ámbitos culturales. También es múltiple en sus nacionalidades, pues Miguel Bosé no oculta que en sus seis décadas de vida ha sumado hasta cuatro diferentes: la panameña, debido a que nació en Panamá; la española, por su padre; italiana, por su madre, e incluso colombiana, que obtuvo en el año 2010 porque sin duda tiene vocación universal.

Nuestro Papito, y nunca mejor, está más radiante que nunca. Y es que esa pequeña broma, además de dar nombre a algunos de sus trabajos musicales, se le puede aplicar con acierto gracias a otra de sus facetas, pues el artista es padre soltero de una familia numerosa.

Bosé es el feliz progenitor de cuatro retoños, Diego y Tadeo, sus mellizos más mediáticos y de los que todo el mundo tenía noticias, y sus dos hijos sorpresa, ésos que no nos esperábamos conocer, Ivo y Telmo, hasta que en una entrevista para la revista "Shangay" soltaba la bomba y fue de dominio público su nueva paternidad. Preocupado por su familia, sobre todo por su sobrina predilecta, Bimba Bosé, con la que ha cantado y a la cual apoyó en sus momentos más bajos debido al cáncer de mama del que salió airosa. La faceta solidaria es parte fundamental de su vida, pues ahí está el ejemplo de las exitosas galas para recaudar fondos contra el sida.