Comenzó la final en el Concurso y Muestra de Folclore "Ciudad de Oviedo", que organizan el Ayuntamiento y LA NUEVA ESPAÑA. La jornada del teatro Filarmónica estuvo presidida por muy sólidas actuaciones en todas las modalidades y por las nuevas normas que rigen en esta fase; en el caso de los cantantes de tonada, tienen que interpretar tres canciones en lugar de las dos que venían cantando en las fases previas, y los gaiteros deben tocar dos piezas obligadas: "El Fontán" y "El Floréu de Remis". Son los mecanismos del jurado para resolver sus puntuaciones de la manera más ajustada posible en estas finales que concluirán el último domingo de este mes de mayo, para dar paso a la gala de entrega de premios, el 12 de junio, en la que, al margen de los invitados, actuarán los nuevos campeones en cada modalidad.

Pero, junto a la trascendencia y brillantez en varias de las actuaciones de los concursantes que ayer inauguraron la fase definitiva, regresaron las muestras de folclore con fuerza. La primera de ellas fue la de Anabel Santiago, todo un símbolo de este concurso, que ganó en varias ocasiones. La cantante, tras pasar por el escenario, firmó discos en el vestíbulo del teatro ante varios seguidores de todas las edades. El álbum, una vez más, resuelve con muy buen estilo entre la tradición y la evolución musical ("soy la indie de la tonada", dijo en su día cuando presentó "Llances de papel"). Santiago contó a LA NUEVA ESPAÑA que estaba muy satisfecha del funcionamiento del álbum, que recientemente presentó en gira por Buenos Aires. Además, tiene un intenso programa de actuaciones para la próximas fechas.

La otra parte de la muestra corrió a cargo de coro "Errante", de la Comarca de la Sidra, formación muy estable, con tiempo en las tablas, como explicó su presidente, Javier Parajón, ya son casi catorce años (desde el año 2003) funcionando; primero con la dirección de Luis Rodríguez y ahora bajo la batuta de Miguel Quintana. El grupo dejó constancia de su sello con la interpretación de dos piezas.

Finalmente la emoción se disparó con el homenaje a Faustino Braña Peláez, un clásico de este y otros muchos concursos que ayer vio recompensada su labor (cuarenta años cantando) por la organización del "Ciudad de Oviedo". El director, Juan Carlos González, y Pedro Rodríguez Cortés le entregaron una distinción de certamen.

Eso sí, Braña Peláez demostró que sigue en forma a sus 81 años. Cantó "Playina la de Xixón" con el Pravianu de gaitero y dejó certificado de por qué su carrera está llena de trofeos.