La considerada como boda del año en Íllora, el municipio de Granada que ha enmarcado el enlace entre el magnate colombiano Alejandro Santo Domingo y Charlotte Wellesley, hija del duque de Wellington, ha llegado con tormenta de aplausos y de agua. La Cuesta Hospital, que conduce a la iglesia de la Encarnación, ha sido literalmente tomada por vecinos de la comarca que se han acomodado en las aceras. Con tiempo londinense y moda española, el enlace entre el magnate colombiano afincado en Nueva York y lady Charlotte, que ya se dejó ver el viernes por el municipio, ha convocado a curiosos empeñados en ponerle arte al peculiar paseo por la "alfombra roja" de un pueblo engalanado con banderas españolas, colombianas e inglesas.