Son una de las referencias inexcusables de la rumba española. Llevan más de cuarenta años en los escenarios y varios de sus temas son estandartes de una música popular que logró transitar, como si tal cosa, de la época del franquismo a la actual democracia. Una renovación en la que "Los Chichos" fue un grupo fundamental. Por eso, quizás, los organizadores de Metrópoli, el festival de ocio y entretenimiento que arrancó ayer en Gijón, pensaron en ellos para el primer concierto de la tercera edición de un certamen que llevó el año pasado a más de 200.000 personas al recinto ferial "Luis Adaro".

Un público fiel, variado, intergeneracional, siguió el repertorio de "Los Chichos" pese a la meteorología inestable que reinó en Gijón y que no impidió una buena entrada. Sus temas son tan conocidos que resulta fácil seguir cada una de las canciones. Así ocurrió cuando arrancaron con un clásico, "Sea como sea". Y fue a más con el segundo, más clásico aún, "son ilusiones", coreados y seguidos con palmas por su legión de fans.

Metrópoli arrancó rumbera. Las entradas, con un precio de 2,5 euros al día, dan derecho a disfrutar de la mayor parte de las actividades, incluidos los conciertos. Por la tarde, se inauguraron asimismo las exposiciones que se ofrecen este año, entre ellas las dedicadas a "Star Wars" ("La guerra de las galaxias") y la que explica las intervenciones del artista Okuda San Miguel en el llamado "Kaos Temple", la iglesia "skate" de Llanera.

El festival también ofreció el primero de los espectáculos que ha programado para este año, "Grease". Se trata de una propuesta interactiva basada en la popular película que Travolta y Olivia Newton-John protagonizaron a finales de los setenta. Los entrenamientos con los drones, para la carrera de mañana, domingo, fueron otro de los alicientes del programa de Metrópoli.