Desarrollar cocinas solares con materiales sencillos y baratos que sustituyan a las que emplean madera, y evitar así el humo para salvar vidas, es el objetivo de un programa de la Universidad Carlos III (UC3M) de Madrid y el Ayuntamiento de Leganés, en el que también colabora el chef Chema de Isidro.

Entre dos y cuatro millones de personas mueren cada año en el mundo de forma prematura por culpa del humo que produce cocinar en los hogares con fuegos de leña. Muchos no tienen siquiera una chimenea que permita su salida controlada, según datos de la OMS. "Mueren más personas por el humo que por el hambre", explica el catedrático del Departamento de Ingeniería Térmica y de Fluidos de UC3M Antonio Lecuona-Neumann. Además de la importante deforestación que producen. La iniciativa se basa en cocinas que reflejan mediante espejos la luz del sol sobre ollas de color negro, lo que permite hacer todo tipo de guisos "a fuego lento".