El astronauta aseguró que los viajes tripulados a Marte podrían llevarse a cabo en un plazo de diez a quince años si se habilitan los recursos materiales y humanos necesarios, y se mostró convencido de que la primera persona que pisará el planeta "está ya en algún colegio". El astronauta afirmó que la tecnología actual permite llevar a cabo viajes tripulados a Marte, pero advirtió de que el proyecto plantea unos importantes retos para lograr que el trayecto sea más cómodo y corto y evitar, por ejemplo, las posibles afecciones de la radiación.