Durante su último concierto en México Alejandro Sanz recibió en la prueba de sonido a los niños de la "Asociación Mexicana de Ayuda a Niños enfermos de Cáncer" como Embajador de la Fundación Juegaterapia. Los pequeños compartieron escenario e instrumentos con el artista. Además les regaló 60 "Baby Pelones", conocidos como "los muñecos más bonitos del mundo", que llevaban un pañuelo que creó el coach con la palabra "guapa" escrita de muchas formas y colores.