Roma celebró ayer el día de la Epifanía del Señor con una serie de actividades dirigidas a las familias, entre las que destacó el desfile de los tres Reyes Magos, montados en caballos, para entregar sus dones al Niño Jesús en un belén viviente.

Melchor, Gaspar y Baltasar partieron desde la plaza de la Cancillería de Roma con dirección a la céntrica plaza Navona, donde llegaron montados en caballos y vestidos con trajes de época.

Junto a ellos, un séquito de pajes y de pastores portaron antorchas para iluminarles el camino e indicarles el recorrido que debían completar antes de presentarse frente al Niño Jesús para poder adorarlo y entregarle sus dones. En la romana plaza Navona realizaron un giro completo que duró unos minutos y durante los cuales saludaron de forma constante a todas las personas que se habían acercado a ver la representación. Un baño de flashes de las cámaras les envolvieron durante todo su recorrido.