El administrador de negocios de la cantante canadiense Alanis Morissette, Jonathan Todd Schwartz, admitió haberle robado 4,8 millones de dólares entre 2010 y 2014. Schwartz presentó una serie de documentos legales en los que confesó ser culpable de fraude electrónico y evasión fiscal y en los que reconoció que, además de los 4,8 millones de Morissette, también sustrajo 1,7 millones de dólares pertenecientes a deportistas y celebridades cuya identidad se desconoce. Schwartz se hizo con dinero de la artista canadiense a través de diferentes métodos como la falsificación de la firma de su famosa clienta.