Rusia ha decidido lanzar su propia saga cinematográfica inspirándose en Marvel, "Los Guardianes", en la que cuatro superhéroes creados genéticamente por científicos soviéticos salvan el mundo de su completa destrucción por las actividades de una organización secreta, llamada Patriot. El director, Sarik Andreasyan, asegura que "no copiamos a Hollywood" e insiste en que los personajes con superpoderes de la saga fueron creados con la vista puesta en los diferentes pueblos que integraban lo que era la antigua Unión Soviética.