No fue un día fácil el de ayer para Paula Echevarría. La actriz asturiana, en pleno proceso de separación del cantante David Bustamante, descansa en su Carreño natal. Ayer pasó el día en la casa familiar, acompañada de los suyos. Tan sólo abandonó su domicilio a las 11.00 horas, sola, a bordo de su coche, sin realizar ninguna declaración y con destino desconocido, del que regresaría, de nuevo a Perlora, unas horas después. El viaje de la actriz podría haber tenido como final San Vicente de la Barquera (Cantabria) para recoger a su hija Daniella, que estuvo pasando unos días junto a su padre, David Bustamante.

En su primera mañana en el Principado la actriz colgó en su cuenta de Instagram una foto en la que se podía leer el mensaje "Have a wonderful wednesday" ("Tened un maravillo miércoles") seguido de tres corazones. Nada más. La ahora expareja de David Bustamante pasó la mayor parte del día en el pareado familiar de Perlora, cuyo portón apenas se abrió.

Lo hizo por primera vez a las 10.32 horas. En ese momento un Mercedes todoterreno, color gris metalizado, llegaba al domicilio de Perlora con dos personas en su interior que, presumiblemente, eran los padres de la actriz. Poco más de media hora después, a las 11.07 horas, sí se pudo ver a Echevarría abandonando el domicilio, a bordo del mismo vehículo, sola y con lo que parecía la funda de unas gafas de sol en la mano.

Tras un par de horas "en paradero desconocido", la asturiana regresaba a su casa, de la que no volvería a salir a la luz del día. No se sabe si la vuelta la realizó desde San Vicente de la Barquera -localidad natal de David Bustamante- o no. Si quiera si lo hizo sola. Si bien, todo apunta a que en el desapercibido hogar de la actriz también pasó la tarde su hija Daniella.

Pese a que ayer "Hola", en su edición digital, recogía que la tertuliana Gema López había asegurado en "Sálvame" que había sido el mismo Bustamante quien había devuelto a Daniella a su madre, desde las inmediaciones de la casa de Perlora no se vio ni rastro del cántabro. Por lo que esta hipótesis parece no tener mucha fuerza. Quien sí hizo acto de presencia durante la tarde fue el hermano de la actriz y experta en moda, que fue junto a sus hijas a pasar la tarde a casa de Echevarría, quién sabe si acompañadas de su prima Daniella. Y es que como ya ha reconocido en numerosas ocasiones la televisiva pareja, existe una "gran relación" entre las primas, y pasar una tarde de juegos puede haber sido la mejor terapia para que la pequeña olvide el foco mediático que rodea a su familia estos días. Durante todo el día, la casa de Echevarría estuvo cercada por numerosos "paparazzis", que no perdieron detalle del más mínimo movimiento que se producía dentro de la opaca verja que rodea el domicilio. Y es que la fractura en la familia Bustamante-Echevarría está siendo, sin duda, el culebrón de la Semana Santa.