El duque de Edimburgo, esposo de la reina Isabel II de Inglaterra, dejará de asistir a actos oficiales a partir de septiembre, una especie de jubilación comunicada por el palacio de Buckingham, ante la que la sociedad británica ha respondido con su agradecimiento al consorte de la soberana.

Buckingham anunció tras horas de especulaciones después de que la Casa Real convocara una reunión de emergencia sin especificar el motivo la retirada del príncipe Felipe de la vida pública.

El duque de Edimburgo, que el próximo 10 de junio cumplirá 96 años, goza de relativamente buena salud y ayer mismo, apenas una hora después del anuncio, acudía junto a la reina a un servicio religioso y un almuerzo organizado por la Orden del Mérito en la capilla real del Palacio de San Jaime.

Durante la jornada se pudo ver al duque en actitud distendida, riendo y bromeando con miembros de la orden, entre ellos el divulgador científico David Attenborough, el dramaturgo Tom Stoppard y el artista David Hockney.

A lo largo del pasado año el esposo de Isabel II acudió a 110 actos oficiales y desde 1952 ha asistido a un total de 22.191, algo que continuará haciendo hasta finales del mes de agosto, tras lo cual ya no aceptará invitaciones, aunque "puede ser" que en el futuro asista a eventos públicos de su elección.

El duque de Edimburgo es patrón, presidente o miembro de más de 780 organizaciones, con las cuales "seguirá estando asociado", aunque no desempeñará "un papel activo".

La nota señala que ha sido él mismo quien ha tomado esta decisión, con el pleno apoyo de la reina, que en abril cumplió 91 años. Por su parte, Isabel II "seguirá llevando a cabo un programa completo de actos oficiales con el apoyo de los miembros de la familia real". La noticia ha provocado la reacción de todos los políticos británicos, inmersos en la campaña electoral para las elecciones generales del próximo 8 de junio.

Tanto la primera ministra británica, Theresa May, como el líder laborista, Jeremy Corbyn, el liberaldemócrata, Tim Farron, y el del Partido para la Independencia del Reino Unido (UKIP), Paul Nuttall -los cuatro principales grupos que concurren a los comicios-, han coincidido en elogiar la labor del duque.

May destacó el apoyo "constante" que el príncipe Felipe ha brindado a su esposa, con la que el próximo 20 de noviembre cumplirá 70 años de matrimonio, y su "servicio al país" durante toda su vida.

En la misma línea se han pronunciado el resto de políticos, incluida la ministra principal escocesa, la nacionalista Nicola Sturgeon, y todos ellos han expresado sus "mejores deseos" para el duque de Edimburgo en su nueva etapa.