Es el último en las apuestas, pero aspira a ser el primero en las votaciones. Manel Navarro, el representante de España en Eurovisión, cotiza a la baja para las casas de apuestas, que le sitúan, todas ellas, cerrando la lista de los 26 finalistas que esta noche, en el Centro Internacional de Exposiciones de Kiev, se disputarán la corona del gran certamen europeo de la canción.

Los números son expresivos. La casa de apuestas Bet365 pagaba ayer 501 euros por cada euro apostado a la victoria de Navarro, mientras apostar por uno de los dos favoritos, el italiano Francesco Gabanni (intérprete de "Occidentali's Karma") y el portugués Salvador Sobral ("Amar pelos dois"), apenas supondría un retorno de entre 2,60 y 2,80 euros al apostante. En cambio, William Hill reduce las distancias, aunque también sitúa al español como el último en las apuestas: su victoria se paga 201 a uno, mientras que la de Gabanni cotiza a 2,37 y la de Sobral a 2,62.

Pese a estas demoledoras cifras, Manel Navarro no pierde la sonrisa y ayer, tras el ensayo general, se mostraba satisfecho con su desempeño sobre el escenario ucraniano. "Me he visto bien, cada vez con más fuerza. Cada vez me veo más cómodo, disfruto más cada vez que salgo. Seguro que mañana (por hoy) lo voy a disfrutar incluso mucho más. Espero que salga todo redondo", afirmó el intérprete de "Do it for your lover", la canción elegida en una selección mixta de jurado especializado y público para representar a España en el certamen.

Pese al optimismo de Navarro, parece difícil que el intérprete catalán pueda romper el gafe de España en un festival que no gana desde que en 1969 Salomé se impusiera con su "Vive cantando". Navarro, eso sí, tiene al alcance de la mano mejorar la actuación de Barei en la edición del año pasado: la intérprete quedó la 22.ª con "Say Yai!".